Qué tipo de calefacción es más rentable para mi vivienda (I)

Cada año con la llegada del frío un tema que nos preocupa es cómo calentar nuestra vivienda,  muchas familias se plantean instalar un sistema de climatización o cambiar el antiguo. Pero ante la gran oferta de sistemas, surge la duda de qué tipo de climatización elegir. En este artículo trataremos de orientar en la toma de decisión, desde el punto de vista del consumo y teniendo en cuenta la reciente subida que hemos sufrido en la factura de electricidad.

El proceso de elección del tipo de climatización para nuestra vivienda no es fácil, ya que no existe una solución general para todos, sino que depende de varios factores concretos de cada vivienda como son la ubicación, el tipo de vivienda, el tiempo que está ocupada, etc. Por tanto, veamos los principales sistemas de climatización que existen y sus características.

Sistemas de climatización

Existen diversas formas de clasificar los sistemas, en este caso lo clasificaremos según el combustible que usan:

  • Calefacción eléctrica. Este tipo de calefacción es la más habitual ya que, en relación al coste de instalación, es más económica que otros sistemas. Además, es una energía limpia, es decir que no hay peligro de contaminación o fuga de ningún tipo de gases tóxicos y no necesita ningún tipo de combustible.  El inconveniente de este tipo de calefacción es su alto coste mensual en la factura, ya que los aparatos consumen mucha electricidad, sobre todo, en zonas donde las temperaturas son extremas y la estancia es grande, necesitan más energía para poder calentarla completamente. Por tanto, podemos decir que la calefacción eléctrica puede ser rentable en el caso de viviendas pequeñas que se encuentran en zonas donde no hace mucho frio y que no necesitan estar calientes las 24 horas (por ejemplo, cuando los habitantes trabajan todo el día y regresan a su casa por la noche), donde se encenderá el sistema solo cuando sea necesario.
  • Calefacción de gas natural. La principal ventaja del gas natural frente a la electricidad es su bajo precio, ya que el gas natural ha mantenido su precio constante, mientras que la electricidad cada vez va aumentando. Sin embargo, el coste de instalación de la calefacción de gas natural es más elevado, sobre todo, en una vivienda unifamiliar. Otro punto clave de este tipo de suministro es la zona geográfica, pues no esta presente en todas las zonas. Por ejemplo, en la zona mediterránea no es muy frecuente su uso.

En el caso de edificios plurifamiliares se opta por la calefacción central de gas natural que consiste en una única caldera centralizada. Esto implica que hay que supone en un gasto fijo, aunque no estés en casa ya que no se puede encender ni apagar de manera individual, pudiendo regular únicamente la temperatura.

  • Calefacción de gasoil: este tipo de calefacción es habitual en las viviendas que no les llega gas natural. La instalación es prácticamente igual que las de gas natural, la diferencia que hay es que la calefacción de gasoil necesita un espacio para ubicar el depósito. El precio del gasoil es más elevado que el gas natural pero un poco inferior a la electricidad, además contamina más que las anteriores soluciones.
  • Calefacción de pellets. Es un sistema menos común, pero muy eficiencia energéticmente y la sostenible, ya que es un sistema que utiliza pellets como combustible para calentar la zona y es menos contaminante que el gasoil. Los pellets son un producto totalmente natural, catalogado como biomasa sólida, el cual está formado por cilindros muy pequeños, de unos pocos milímetros de diámetro. Elaborados a partir de serrín natural seco, sin ningún aditivo. Su precio es también bajo y puede calentar perfectamente una estancia igual que otro sistema eléctrico o de gasoil, pero necesita un espacio grande para instalar la estufa y el almacenamiento de pellets.
  • Calefacciones sostenibles (aerotermia, geotermia y solar). Son sistemas modernos cuyo coste de instalación es más elevado que los demás, sobre todo el sistema geotérmico porque implica la instalación de tuberías y bombas debajo de la tierra. Estos sistemas funcionan mediante el aprovechamiento del calor existente en la naturaleza (aire, tierra o radiación solar) para convertirlo en energía térmica. Es una energía gratuita, lo que supone gran disminución en la demanda energética y, por tanto, gran ahorro económico en la factura que puede llegar al 70%. La ventaja de este tipo de suministro es que disponen de bomba de calor que puede ser utilizada también en verano para refrigeración. Este tipo de suministro es muy eficiente energéticamente y respetuoso con el medio ambiente. Es más rentable si se instala en una vivienda en la que se hace uso continuo de climatización. Es el mejor sistema compatible con la calefacción con suelo radiante.

Dicho esto, podemos deducir que instalar un sistema de calefacción no depende solo del coste inicial sino de varios factores que afectan a largo plazo. Por eso, es muy importante pensar bien antes de decidir. Si tienes cualquier duda y quieres conocer la instalación más adecuada para tu vivienda, no dudes en ponerte en contacto con un arquitecto técnico.

En el siguiente artículo hablamos de los elementos que componen los sistemas de calefacción, ya que conocerlos y saber como funcionan nos dará una mejor perspectiva y nos ayudará a elegir mejor. 

Accede como colegiado de activatie para poder comentar.

Qué tipo de calefacción es más rentable para mi vivienda (I)

Qué tipo de calefacción es más rentable para mi vivienda (I)

Otras publicaciones

Recomendaciones a tener en cuenta antes de instalar una piscina en la terraza de casa
  • 3 jul. 2023

  • activatie

Recomendaciones a tener en cuenta antes de instalar una piscina en la terraza de casa

Consejo Mantenimiento Con la llegada del verano es muy común colocar piscinas portátiles para poder refrescarse sin tener que salir de casa. Pero es necesario tener en cuenta una serie de recomendaciones previas para evitar llevarnos un susto innecesario por sobrecargar la estructura, ya que lo más probable es que esta no esté diseñada para este uso. En primer lugar, y antes de comprar la piscina, es necesario conocer las características del forjado sobre la cual se va a colocar, antigüedad, estado de conservación, etc. y determinar el peso máximo que puede soportar sin causar daños, o en el peor de los casos, colapsar. Este dato determinará el tamaño de la piscina y el volumen de agua que podemos añadir. En concreto, una cubierta que inicialmente no estaba calculada para este sobrepeso, puede soportar entre 100 y 200 kilos por metro cuadrado, lo que equivale a una lámina de agua entre 10 y 20 centímetros de altura, aproximadamente. En edificios de reciente construcción, si las dimensiones de la piscina son inferiores a 0,8 por 1,5 metros, se podrá incrementar la altura de agua a 0,40 centímetros.* Por otro lado debemos tener en cuenta si el forjado que sustenta esa estructura es un elemento común del edificio. Y en ese caso, comunicar a la comunidad de propietarios nuestra propuesta de colocar la piscina, y acompañarlo de un informe técnico que garantice la viabilidad. Además, en aquellas piscinas que pudieran ser objeto de uso comunitario este informe técnico contará con las especificaciones propias sobre las limitaciones de uso, aforo y sanitarias. Por todo lo expuesto, el mejor consejo sería, en caso de dudas, contactar con un técnico experto en este tipo de cuestiones, los arquitectos técnicos lo somos, para que compruebe el peso que es capaz de soportar la estructura de la terraza de su vivienda. *Información extraída de la Nota de prensa elaborada por CGATE, CSCAE, CGCAFE *Imagen de pvproductions en Freepik

Fisuras en mi vivienda ¿me debo preocupar?
  • 19 sep. 2023

  • Colegio_Murcia

Fisuras en mi vivienda ¿me debo preocupar?

Consejo Mantenimiento En muchas ocasiones nos asustamos al ver que aparecen ciertas aberturas en nuestros edificios, generalmente en los paramentos verticales, aunque también pueden verse en suelos y techos, y a simple vista es difícil saber si son preocupantes o no. En primer lugar, debemos distinguir si se trata de una fisura o de una grieta, y se diferencian según el tamaño de las aberturas y el lugar donde aparecen: Las fisuras son aberturas pequeñas que aparecen en la superficie de revestimientos y por tanto provocan daños superficiales que simplemente afectan a la estética. Sin embargo, las grietas son aberturas más grandes y profundas que suelen aparecen en los elementos estructurales (pilares, muros de hormigón, …) y afectan gravemente a la edificación. Las fisuras pueden aparecer en la superficie del material por varios motivos: mala calidad de los materiales. inadecuada aplicación de la pintura sobre el paramento. golpes, vibraciones o impactos. dilatación y contracción de los materiales por cambios bruscos en la temperatura. humedades y cristalización de sales. incompatibilidad química entre distintos materiales. En la mayoría de los casos, las fisuras pueden ser reparadas fácilmente quitando el revestimiento y aplicando otro nuevo. Al contrario, las grietas nos pueden avisar de daños estructurales que suelen estar provocados por fallos en el cálculo o la mala ejecución de un elemento estructural. Dichas grietas deben ser analizadas y estudiadas para saber si van aumentando de tamaño con el tiempo y así conocer el tipo de solución a realizar. Por tanto, al ver una abertura en nuestra vivienda y ante la duda de saber si se trata de una fisura o grieta, recomendamos contactar con un arquitecto técnico, que como experto en edificación, podrá analizar el problema y encontrar la solución más adecuada a nuestro caso, evitándole asumir riesgos innecesarios.

Reutilización de agua en viviendas
  • 18 feb. 2015

  • Colegio_Murcia

Reutilización de agua en viviendas

Consejo Ahorro de agua La Consejería de Agricultura y Agua de la Región de Murcia publicó una interesante guía en la que se exponen las medidas que se pueden implantar en las viviendas para ahorrar agua. De entre las medidas que recoge, destacamos la que nos ofrece la posibilidad de reutilizar el agua. La reutilización del agua dos veces es una solución sencilla, práctica y muy eficaz,  tanto desde el punto de vista ecológico como económico, ya que por un lado, nos permite reducir el consumo de agua potable con el consecuente ahorro y por otro, reducir la producción de aguas residuales. Actualmente, diversos fabricantes comercializan una serie de sistemas integrados que se instalan en el propio cuarto de baño y que, reutilizan el agua de la ducha, del lavabo y del inodoro. Otra posibilidad dirigida a las viviendas unifamiliares consiste en recoger el agua procedente de las duchas y lavabos, almacenarla y tratarla en pequeñas depuradoras, que se instalan en sótanos o en el jardín, para posteriormente utilizar el agua regenerada en los inodoros y en el riego de zonas verdes. Para aumentar estos volúmenes de agua se puede optar por recoger el agua de lluvia e incorporarla a la recogida en las duchas y lavabos de las viviendas. Otra opción, es recoger únicamente el agua de lluvia, almacenarla y tratarla, para después utilizarla en el riego de jardines. Tenga en cuenta que las viviendas unifamiliares que cuentan con su propia parcela verde consumen, por término medio, entre 2,5 y 4,5 litros más de agua que las viviendas construidas en edificios. Y, como recomendación de seguridad, no olvide que siempre que reutilice agua, tanto en sistemas integrados para cuartos de baño como en depósitos de viviendas unifamiliares, es necesario tratarla mediante depuradoras para evitar problemas sanitarios e higiénicos. Si está interesado en la instalación de este tipo de dispositivos, consulte con su Aparejador de Cabecera quien le asesorará y recomendará la opción que mejor se adapte a su vivienda. Descárgate la guía completa